El día 26 de noviembre recibimos la buena noticia, nuestro cajón nuclero, fabricado enteramente por nosotros y con materiales sobrantes nuevos, capturó su primer enjambre. Lo había colocado en el calistemo que tenemos en la casa de los viejos, en San Isidro. Según la opinion de mi madre se debió a que las orquídeas colgantes florecieron y eso atrajo a las nuevas integrantes de nuestro plantel. Y quien soy yo para desmentir la opinión de mi vieja.

Lo bueno es que estiraron dos hermosos panales en los lugares que Debían ir dos marcos centrales con cera estampada. La reina es nueva y tiene un aspecto excelente, falta que nos demuestre su prolificidad y genere una abundante cantidad de cría. El núcleo lo pase a cámara de cría con los panales incrustados en dos marcos alambrados y respetando su posición original, el resto lo complete con marcos con cera estampada y un alimentador con jarabe al 50 % para estimularlas.

Por otro lado llegaron las tan esperadas lluvias, jueves por la noche, viernes por la mañana, sábado por la tarde-noche y domingo con algunas lloviznas intermitentes. Prometen corregir un poco la gran sequía de este año y quizás mejorar alguna que otra floración que permita almacenar algo de miel en las alzas.

Mientras tanto continuaremos con nuestro trabajo en el campo y sobre todo en la huerta.